Cuatro nadadores solidarios afincados en Andalucía, Natasha Feith, Luis José Gil Arranz, Rafael Guerrero y Pedro José Moreno, han completado en la jornada de este martes, 17 de noviembre, uno de los retos más anhelados del mundo, el cruce del Estrecho de Gibraltar.

El objetivo de este desafío es el de recaudar fondos para la construcción de una escuela en la India de la mano de la Fundación Vicente Ferrer.

Los nadadores emplearon cinco horas y veinte minutos en realizar el cruce. Llegaron a la costa de Tánger pasadas las cinco de la tarde. La corriente en contra dificultó el primer tramo del cruce, pero las condiciones fueron más favorables en la segunda mitad del recorrido.

El reto está impulsado por la asociación Rumbo Solidario, cuya filosofía es contribuir, a través del deporte, a erradicar la pobreza en las zonas más desfavorecidas del mundo y a difundir la realidad de estos pueblos.

A lo largo de todo el año, los promotores del reto están recaudando fondos para finalizar la construcción de una escuela a través de la Fundación Vicente Ferrer en el pueblo de Konduru, situado en el área de Lepakshi, en la región de Madakasira, para los niños y niñas de esta población. La educación es un punto clave para su crecimiento personal, su libertad, su independencia, y para sus posibilidades de vivir una vida digna.

Rumbo Solidario promovió su primer cruce del Estrecho a nado en 2013, cuando otros ocho nadadores completaron la travesía. En 2014, otros ocho superaron el reto, y este año, son 12 los nadadores vinculados a Rumbo Solidario que aguardan las condiciones óptimas para el cruce. Además del primer grupo, formado por Natasha Feith, Luis José Gil Arranz, Rafael Guerrero y Pedro José Moreno Pontes, otros dos grupos esperan a que se den buenas condiciones meteorológicas y de la mar para enfrentarse al cruce. Rumbo Solidario es una asociación vinculada a la Fundación Vicente Ferrer (FVF), una ONGD (Organización No Gubernamental de Desarrollo) comprometida con el proceso de transformación de una de las zonas más pobres y necesitadas de la India, y de algunas de las comunidades más pobres y excluidas del planeta, los llamados dálits o intocables, los grupos tribales y las denominadas castas desfavorecidas.

Entre sus múltiples proyectos, la FVF trabaja en la creación de escuelas complementarias en aldeas para asegurar que los niños de estas comunidades puedan seguir los estudios establecidos en el programa escolar gubernamental, de forma que se facilite su integración social. Los nadadores del cruce del Estrecho 2015 han recaudado fondos durante este año para apoyar la construcción de una de estas escuelas.